Programa 21: Capítulo 21
21. GESTIÓN ECOLÓGICAMENTE RACIONAL DE LOS
DESECHOS SÓLIDOS Y CUESTIONES RELACIONADAS CON LAS AGUAS CLOACALES
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21.1 El presente capítulo se ha incorporado en el Programa 21 en
cumplimiento de lo dispuesto en el párrafo 3 de la sección I de la
resolución 44/228 de la Asamblea General, en que la Asamblea afirmó
que la Conferencia debía elaborar estrategias y medidas para detener e
invertir los efectos de la degradación del medio ambiente en el
contexto de la intensificación de los esfuerzos nacionales e
internacionales hechos para promover un desarrollo sostenible y
ambientalmente racional en todos los países, y en el párrafo 12 g) de
la sección I de la misma resolución, en que la Asamblea afirmó que la
gestión ecológicamente racional de los desechos se encontraba entre
las cuestiones que más importancia tenían para mantener la calidad del
medio ambiente de la Tierra y, sobre todo, para lograr un desarrollo
sostenible y ecológicamente racional en todos los países.
21.2 Las esferas de programa incluidas en el presente capítulo del
Programa 21 están estrechamente relacionadas con las siguientes áreas
de programas de otros capítulos del Programa 21:
a) Protección de la calidad y el suministro de los recursos de
agua dulce: aplicación de criterios integrados para el
aprovechamiento, ordenación y uso de los recursos de agua dulce (capítulo
18);
b) Fomento del desarrollo sostenible de los asentamientos humanos (capítulo
7);
c) Protección y fomento de la salubridad (capítulo 6);
d) Evolución de las modalidades de consumo (capítulo 4).
21.3 Los desechos sólidos, a los efectos del presente capítulo,
comprenden todos los residuos domésticos y los desechos no peligrosos,
como los desechos comerciales e institucionales, las basuras de la calle
y los escombros de la construcción. En algunos países, el sistema de
gestión de los desechos sólidos también se ocupa de los desechos
humanos, tales como los excrementos, las cenizas de incineradores, el
fango de fosas sépticas y el fango de instalaciones de tratamiento de
aguas cloacales. Si esos desechos tienen características peligrosas
deben tratarse como desechos peligrosos.
21.4 La gestión ecológicamente racional de los desechos debe ir más
allá de la simple eliminación o el aprovechamiento por métodos
seguros de los desechos producidos y procurar resolver la causa
fundamental del problema intentando cambiar las pautas no sostenibles de
producción y consumo. Ello entraña la aplicación del concepto de
gestión integrada del ciclo vital que representa una oportunidad única
de conciliar el desarrollo con la protección del medio ambiente.
21.5 En consecuencia, el marco de la acción necesaria debería
apoyarse en una jerarquía de objetivos y centrarse en las cuatro
principales áreas de programas relacionadas con los desechos, a saber:
a) Reducción al mínimo de los desechos;
b) Aumento al máximo de la reutilización y el reciclado ecológicamente
racionales de los desechos;
c) Promoción de la eliminación y el tratamiento ecológicamente
racionales de los desechos;
d) Ampliación del alcance de los servicios que se ocupan de los
desechos.
21.6 Como las cuatro áreas de programas están correlacionadas y se
apoyan mutuamente, deberán estar integradas a fin de constituir un
marco amplio y ecológicamente racional para la gestión de los desechos
sólidos municipales. La combinación de actividades y la importancia
que se dé a cada una de esas cuatro áreas variarán según las
condiciones socioeconómicas y físicas locales, las tasas de generación
de desechos y la composición de éstos. Todos los sectores de la
sociedad deberían participar en todas las áreas de programas.
AREAS DE PROGRAMAS
A. Reducción al mínimo de los desechos
Bases para la acción
21.7 La existencia de pautas de producción y consumo no sostenibles
está aumentando la cantidad y variedad de los desechos persistentes en
el medio ambiente a un ritmo sin precedentes. Esta tendencia podría
aumentar considerablemente las cantidades de desechos producidos para
finales del siglo, y cuadruplicarlas o quintuplicarlas para el año
2025. Un enfoque preventivo de la gestión de los desechos centrado en
la transformación del estilo de vida y de las modalidades de producción
y consumo ofrece las mayores posibilidades de invertir el sentido de las
tendencias actuales.
Objetivos
21.8 Los objetivos de esta área son los siguientes:
a) Estabilizar o reducir, en un plazo convenido, la producción de
desechos destinados a su eliminación definitiva, formulando objetivos
sobre la base del peso, el volumen y la composición de los desechos y
promover la separación para facilitar el reciclado y la reutilización
de los desechos;
b) Reforzar los procedimientos para determinar la cantidad de
desechos y las modificaciones en su composición con objeto de
formular políticas de reducción al mínimo de los desechos,
utilizando instrumentos económicos o de otra índole para promover
modificaciones provechosas sobre las modalidades de producción y
consumo.
21.9 Los gobiernos, según la capacidad y los recursos de que
dispongan, y con la cooperación de las Naciones Unidas y de otras
organizaciones competentes, según proceda, deberían:
a) Contar para el año 2000 con una capacidad nacional, regional e
internacional suficiente para obtener, tratar y analizar la información
relativa a la tendencia de los desechos y aplicar políticas
encaminadas a su reducción al mínimo;
b) Haber establecido para el año 2000 en todos los países
industrializados programas para estabilizar o disminuir, si resulta
practicable, la producción de desechos destinados a su eliminación
definitiva, inclusive los desechos per cápita (en los casos en que se
aplique este concepto), en el nivel alcanzado en esa fecha; los países
en desarrollo deberían también tratar de lograr ese objetivo sin
comprometer sus perspectivas de desarrollo;
c) Aplicar para el año 2000 en todos los países, y en particular
en los países industrializados, programas para reducir la producción
de desechos agroquímicos, contenedores y materiales de embalaje que
no cumplan con las normas para materiales peligrosos.
Actividades
a) Actividades de gestión
21.10 Los gobiernos deberían iniciar programas para lograr que se
mantenga la reducción al mínimo de la generación de desechos. Habría
que alentar a las organizaciones no gubernamentales y a los grupos de
consumidores a que participen en dichos programas, que podrían
elaborarse con la cooperación de las organizaciones internacionales, en
caso necesario. Esos programas tendrían que basarse, siempre que sea
posible, en las actividades actuales o previstas y se debería:
a) Desarrollar y reforzar las capacidades nacionales en materia de
investigación y elaboración de tecnologías ecológicamente
racionales, así como también tomar medidas para disminuir los
desechos a un mínimo;
b) Establecer incentivos para reducir las modalidades de producción
y consumo no sostenibles;
c) Elaborar, en los casos en que sea necesario, planes nacionales
para reducir al mínimo la generación de desechos como parte de los
planes nacionales de desarrollo;
d) En las compras efectuadas en el sistema de las Naciones Unidas,
hacer hincapié en consideraciones sobre la reducción al mínimo de
los desechos.
b) Datos e información
21.11 La vigilancia es un requisito esencial para poder seguir de
cerca los cambios en la cantidad y calidad de los desechos y sus
consecuencias para la salud y el medio ambiente. Los gobiernos, con el
apoyo de las organizaciones internacionales, deberían:
a) Elaborar y aplicar metodologías para la vigilancia de la
producción de desechos en el plano nacional;
b) Reunir y analizar datos, establecer objetivos nacionales y
mantenerse al tanto de los progresos alcanzados;
c) Utilizar datos para evaluar la idoneidad ecológica de las políticas
nacionales en materia de desechos como base para tomar medidas
correctivas;
d) Aportar información a los sistemas de información mundiales.
c) Cooperación y coordinación en los planos internacional y
regional
21.12 Las Naciones Unidas y las organizaciones intergubernamentales,
con la colaboración de los gobiernos, deberían ayudar a promover la
reducción al mínimo de los desechos facilitando un mayor intercambio
de información, conocimientos técnicos y experiencia. La siguiente es
una lista no exhaustiva de las actividades concretas que podrían
realizarse:
a) Determinar, desarrollar y armonizar metodologías para vigilar
la producción de desechos y transmitir esas metodologías a los países;
b) Determinar y ampliar las actividades de las redes de información
existentes sobre tecnologías limpias y reducción al mínimo de los
desechos;
c) Realizar una evaluación periódica, cotejar y analizar los
datos de los países e informar sistemáticamente, en un foro
apropiado de las Naciones Unidas, a los países interesados;
d) Examinar la eficacia de todos los instrumentos de reducción de
los desechos y determinar qué nuevos instrumentos podrían utilizarse,
así como las técnicas mediante las cuales podrían ponerse en práctica
en los países. Deberían establecerse orientaciones y códigos de práctica;
e) Investigar las repercusiones sociales y económicas de la
reducción de los desechos entre los consumidores.
Medios de ejecución
a) Financiación y evaluación de los costos
21.13 La Secretaría de la Conferencia sugiere que los países
industrializados consideren la posibilidad de invertir en la reducción
al mínimo de los desechos el equivalente de aproximadamente un 1% de
los gastos de gestión de desechos sólidos y eliminación de aguas
cloacales. En cifras actuales esta suma ascendería a unos 6.500
millones de dólares anuales, incluidos aproximadamente 1.800 millones
de dólares para reducir al mínimo los desechos sólidos municipales.
Las sumas efectivas serían determinadas por las autoridades
presupuestarias competentes municipales, provinciales y nacionales, basándose
en las circunstancias locales.
b) Medios científicos y tecnológicos
21.14 Será preciso determinar y difundir ampliamente tecnologías y
procedimientos adecuados para reducir al mínimo los desechos. Esta
labor debería ser coordinada por los gobiernos con la cooperación y
colaboración de organizaciones no gubernamentales, instituciones de
investigación y los organismos competentes de las Naciones Unidas, y
podría comprender lo siguiente:
a) Mantener bajo examen continuo la eficacia de todos los
instrumentos de reducción al mínimo de los desechos e identificar
los nuevos instrumentos que podrían utilizarse, así como las técnicas
mediante las cuales éstos podrían ponerse en práctica en los países.
Deberían establecerse orientaciones y códigos de práctica;
b) Promover la prevención y la reducción al mínimo de los
desechos como objetivo principal de los programas nacionales de gestión
en la materia;
c) Promover la educación pública y una gama de incentivos
reglamentarios y de otro tipo para estimular a la industria a
modificar el diseño de los productos y reducir los desechos
procedentes de los procesos industriales mediante el empleo de
tecnologías de producción más limpias, y buenas prácticas de
administración, así como alentar a la industria y a los consumidores
a utilizar tipos de envases que se puedan volver a usar sin riesgo;
d) Ejecutar, de acuerdo con las capacidades nacionales, programas
de demostración y experimentales para mejorar lo más posible los
instrumentos de reducción de los desechos;
e) Establecer procedimientos para el transporte, el almacenamiento,
la conservación y la gestión adecuados de productos agrícolas,
productos alimenticios y otros productos perecederos a fin de reducir
las pérdidas de esos productos, que conducen a la producción de
desechos sólidos;
f) Facilitar la transferencia de tecnologías de reducción de los
desechos a la industria, especialmente en los países en desarrollo, y
establecer normas nacionales concretas para los afluentes y desechos sólidos,
teniendo en cuenta, entre otras cosas, el consumo de materias primas y
de energía.
c) Desarrollo de los recursos humanos
21.15 La labor de desarrollo de los recursos humanos para la reducción
al mínimo de los desechos no sólo debería destinarse a los
profesionales del sector de gestión de los desechos sino que también
debería procurar el apoyo de los ciudadanos y de la industria. Por
consiguiente, los programas de desarrollo de los recursos humanos deben
tener por objeto crear conciencia y educar e informar a los grupos
interesados y al público en general. Los países deberían incorporar
en los programas de estudios, cuando proceda, los principios y prácticas
referentes a la prevención y reducción de los desechos y material
relativo a sus efectos sobre el medio ambiente.
B. Aumento al máximo del reaprovechamiento y reciclado ecológicamente
racionales de los desechos
Bases para la acción
21.16 La repleción de los vertederos tradicionales, la aplicación
de controles ecológicos más estrictos a la eliminación de desechos y
el aumento de la cantidad de desechos de mayor persistencia,
especialmente en los países industrializados, han contribuido en
conjunto al rápido incremento de los costos de los servicios de
eliminación de desechos. Esos costos podrían duplicarse o triplicarse
para fines del decenio. Las prácticas seguidas actualmente en materia
de eliminación amenazan el medio ambiente. A medida que se modifica la
economía de los servicios de eliminación de desechos, su reciclado y
la recuperación de recursos están resultando cada día más rentables.
En los futuros programas de gestión de los desechos se deberían
aprovechar al máximo los enfoques basados en el rendimiento de los
recursos, para controlar la producción de desechos. Estas actividades
deberían realizarse conjuntamente con programas de educación del
público. Es importante que se determinen los mercados para los
productos procedentes de materiales aprovechados al elaborar los
programas de aprovechamiento y reciclado.
Objetivos
21.17 Los objetivos en esta área de programas son los siguientes:
a) Reforzar y ampliar los sistemas nacionales de reciclado de
desechos;
b) Crear en el sistema de las Naciones Unidas un programa modelo
para el reaprovechamiento y el reciclado internos de los desechos
generados, incluido el papel;
c) difundir información, técnicas e instrumentos de política
adecuados para fomentar y poner en marcha los sistemas de
reaprovechamiento y reciclado de los desechos.
21.18 Los gobiernos, según la capacidad y los recursos de que
dispongan y con la cooperación de las Naciones Unidas y de otras
organizaciones competentes, según proceda, deberían:
a) Promover para el año 2000 la capacidad financiera y tecnológica
en los planos regional, nacional y local, según proceda, que sea
suficiente para poder aplicar políticas y medidas de
reaprovechamiento y reciclado de desechos;
b) Tener para el año 2000 en todos los países industrializados y
para el año 2010 en todos los países en desarrollo un programa
nacional que incluya, en la medida de lo posible, objetivos para el
reaprovechamiento y el reciclado eficaces de los desechos.
Actividades
a) Actividades de gestión
21.19 Los gobiernos, las instituciones y las organizaciones no
gubernamentales, incluidos los grupos de consumidores, mujeres y jóvenes
y en colaboración con los organismos competentes del sistema de las
Naciones Unidas, deberían iniciar programas para demostrar y poner en
práctica el reaprovechamiento y el reciclado de un volumen mayor de
desechos. Tales programas, siempre que sea posible, deberían basarse en
actividades ya en curso o proyectadas y:
a) Desarrollar y reforzar la capacidad nacional de reaprovechar y
reciclar una proporción de desechos cada vez mayor;
b) Revisar y reformar las políticas nacionales en materia de
desechos a fin de proporcionar incentivos para el reaprovechamiento y
el reciclado;
c) Elaborar y aplicar planes nacionales para la gestión de los
desechos que aprovechen el reaprovechamiento y el reciclado de los
desechos y les den prioridad;
d) Modificar las normas vigentes o las especificaciones de compra
para evitar discriminación en contra de materiales reciclados,
teniendo en cuenta las economías en el consumo de energía y de
materias primas;
e) Elaborar programas de sensibilización e información del público
para fomentar la utilización de productos reciclados.
b) Datos e información
21.20 La información e investigación son necesarias para determinar
formas ventajosas, rentables y socialmente aceptables de
reaprovechamiento y reciclado de desechos que estén adaptadas a cada país.
Por ejemplo, las actividades de apoyo que emprendiesen los gobiernos
nacionales y locales en colaboración con las Naciones Unidas y otras
organizaciones internacionales podrían comprender:
a) Llevar a cabo un amplio examen de las opciones y técnicas de
reciclado de toda clase desechos sólidos municipales. Las políticas
de reaprovechamiento y reciclado deberían formar parte integrante de
los programas nacionales y locales de gestión de los desechos;
b) Evaluar el alcance y los métodos de las actuales operaciones de
reaprovechamiento y reciclado de desechos y determinar la manera de
intensificarlas y apoyarlas;
c) Incrementar la financiación de programas experimentales de
investigación con el fin de ensayar diversas opciones de
reaprovechamiento y reciclado de desechos, entre ellas, la utilización
de pequeñas industrias artesanales de reciclado; la producción de
abono orgánico; el riego con aguas residuales tratadas; y la
recuperación de energía a partir de los desechos;
d) Elaborar directrices y prácticas para el reaprovechamiento y
reciclado de los desechos;
e) Intensificar los esfuerzos para reunir, analizar y difundir
información en materia de desechos a los grupos destinatarios clave.
Se podrían ofrecer becas especiales para investigación, adjudicadas
por concurso, con objeto de fomentar los proyectos de investigación
encaminados a renovar las técnicas de reciclado;
f) Determinar los posibles mercados para los productos reciclados.
c) Cooperación y coordinación en los planos internacional y
regional
21.21 Los Estados, por medio de la cooperación bilateral y
multilateral, incluidas las Naciones Unidas y otras organizaciones
internacionales competentes, según proceda, deberían:
a) Examinar periódicamente en qué medida los países aprovechan y
reciclan sus desechos;
b) Examinar la eficacia de las técnicas y métodos de
reaprovechamiento y reciclado de desechos y estudiar la manera de
difundir su aplicación en los países;
c) Examinar y actualizar las directrices internacionales para el
reaprovechamiento y reciclado de los desechos por métodos seguros;
d) Elaborar programas adecuados para prestar apoyo a las industrias
de reutilización y reciclado de desechos de las comunidades pequeñas
en los países en desarrollo.
Medios de ejecución
a) Financiación y evaluación de los costos
21.22 La Secretaría de la Conferencia ha estimado que si el
equivalente de un 1% de los gastos municipales de gestión de los
desechos se dedicase a proyectos de reaprovechamiento de los desechos
por métodos seguros, los gastos mundiales para ese fin ascenderían a
8.000 millones de dólares. La secretaría ha estimado que el costo
total por año (1993-2000) de ejecución de las actividades de esta área
en los países en desarrollo ascenderá a unos 850 millones de dólares,
otorgados en forma de donaciones o en condiciones de favor. Estas
estimaciones son indicativas y aproximadas únicamente y no han sido
objeto de examen por los gobiernos. Los costos reales y las condiciones
financieras, incluidas las no concesionarias, dependerán, entre otras
cosas, de las estrategias y los programas específicos que los gobiernos
decidan ejecutar.
b) Medios científicos y tecnológicos
21.23 La transferencia de tecnología debería prestar apoyo al
reciclado y el reaprovechamiento de los desechos de la forma siguiente:
a) Incluir la transferencia de tecnologías de reciclado, tales
como la maquinaria para el reaprovechamiento de los plásticos, la
goma y el papel en los programas de ayuda y cooperación técnica
bilaterales y multilaterales;
b) Desarrollar y mejorar las tecnologías existentes, especialmente
las locales, y facilitar su transferencia en el marco de los programas
en curso de asistencia técnica regional e interregional;
c) Facilitar la transferencia de la tecnología de
reaprovechamiento y reciclado de los desechos.
21.24 Los incentivos para el reaprovechamiento y el reciclado de los
desechos son numerosos. Los países podrían considerar las siguientes
posibilidades para alentar a la industria, las instituciones, los
establecimientos comerciales y los particulares a reciclar los desechos
en lugar de eliminarlos:
a) Ofrecer incentivos a las autoridades locales y municipales para
que reciclen la máxima proporción de sus desechos;
b) Proporcionar asistencia técnica a las actividades informales de
reaprovechamiento y reciclado de residuos;
c) Emplear instrumentos económicos y normativos, incluso
incentivos fiscales, para apoyar el principio de que los que producen
desechos deben pagar por su eliminación;
d) Prever las condiciones jurídicas y económicas que fomenten la
inversión en el reaprovechamiento y reciclado de desechos;
e) Utilizar mecanismos específicos, tales como sistemas de depósito
y devolución, como incentivo para el reaprovechamiento y el reciclado;
f) Fomentar la recogida por separado de las partes reciclables de
los desechos domésticos;
g) Proporcionar incentivos para aumentar la comerciabilidad de los
desechos técnicamente reciclables;
h) Fomentar el empleo de materiales reciclables, principalmente en
el embalaje, siempre que sea posible;
i) Fomentar la formación de mercados para los productos reciclados
instituyendo a tal efecto los programas correspondientes.
c) Desarrollo de los recursos humanos
21.25 Será preciso impartir capacitación para reorientar las
actuales prácticas de gestión de los desechos a fin de incluir en ésta
el reaprovechamiento y el reciclado. Los gobiernos, en colaboración con
las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales y regionales,
deberían aprobar la siguiente lista indicativa de las medidas que podrían
tomarse:
a) Incluir en los programas de capacitación en el servicio el
reaprovechamiento y el reciclado de desechos como parte integrante de
los programas de cooperación técnica en materia de administración
urbana y creación de infraestructura;
b) Ampliar los programas de capacitación en abastecimiento de agua
y saneamiento ambiental con la incorporación de técnicas y políticas
de reaprovechamiento y reciclado de desechos;
c) Incluir le enseñanza de las ventajas y las obligaciones cívicas
que entrañan el reaprovechamiento y el reciclado de desechos en los
programas de estudios y en los cursos pertinentes de educación
general;
d) Alentar a las organizaciones no gubernamentales, las
organizaciones comunitarias, los grupos de mujeres y de jóvenes y los
programas de grupos de interés público, en colaboración con las
autoridades municipales locales, a movilizar el apoyo comunitario al
reaprovechamiento y el reciclado de desechos mediante campañas
centradas en la comunidad.
d) Aumento de la capacidad
21.26 El aumento de la capacidad en apoyo del reaprovechamiento y el
reciclado de un mayor volumen de residuos debería centrarse en las
esferas siguientes:
a) Poner en práctica políticas nacionales e incentivos para la
gestión de los desechos;
b) Hacer que las autoridades locales y municipales puedan movilizar
el apoyo de la comunidad para el reaprovechamiento y el reciclado de
los desechos interesando y prestando asistencia al sector no
estructurado en las actividades de reaprovechamiento y reciclado de
desechos y planificando la gestión de los desechos incorporándole
sistemas de recuperación de recursos.
C. Promoción de la eliminación y el tratamiento ecológicamente
racionales de los desechos
Bases para la acción
21.27 Aun cuando los desechos se reduzcan al mínimo, siempre quedarán
algunos Incluso después de su tratamiento, todos los vertidos de
desechos producen algún efecto residual en el medio ambiente en el que
se realizan. Por consiguiente, existe margen para mejorar las prácticas
de tratamiento y eliminación de desechos adoptando, por ejemplo, la de
evitar el vertido de fango residual en el mar. En los países en
desarrollo ese problema tiene un carácter aún más fundamental: menos
del 10% de los desechos urbanos son objeto de algún tratamiento y sólo
en pequeña proporción tal tratamiento responde a una norma de calidad
aceptable. Debería concederse la debida prioridad al tratamiento y la
eliminación de las materias fecales dada la amenaza que suponen para la
salud humana.
Objetivos
21.28 El objetivo en esta área es tratar y eliminar con métodos
seguros una proporción creciente de los desechos producidos.
21.29 Los gobiernos, según la capacidad y los recursos de que
dispongan y con la cooperación de las Naciones Unidas y de otras
organizaciones competentes, según proceda, deberían:
a) Establecer para el año 2000 criterios de calidad, objetivos y
normas referentes a la eliminación y el tratamiento de los desechos
que estén basados en la naturaleza y capacidad de asimilación del
medio receptor;
b) Disponer para el año 2000 de capacidad suficiente para vigilar
los efectos de la contaminación debida a los desechos y mantener una
vigilancia sistemática, incluida la vigilancia epidemiológica,
cuando proceda;
c) Velar por que para el año 1995 en los países industrializados
y para el año 2005 en los países en desarrollo por lo menos el 50%
de las aguas cloacales, las aguas residuales y los desechos sólidos
se traten o eliminen de conformidad con directrices nacionales o
internacionales de calidad ambiental y sanitaria;
d) Eliminar para el año 2025 todas las aguas cloacales, las aguas
residuales y los desechos sólidos de conformidad con directrices
nacionales o internacionales de calidad ambiental.
Actividades
a) Actividades de gestión
21.30 Los gobiernos, las instituciones y las organizaciones no
gubernamentales, junto con la industria, y en colaboración con las
organizaciones competentes del sistema de las Naciones Unidas, deberían
iniciar programas para mejorar la gestión y reducción de la
contaminación debida a los desechos. Siempre que fuese posible, esos
programas deberían basarse en actividades ya en curso o proyectadas y
prever lo siguiente:
a) Desarrollar y reforzar la capacidad nacional para tratar los
desechos y eliminarlos por métodos seguros;
b) Revisar y reformar las políticas nacionales de gestión de
desechos para llegar a reducir la contaminación debida a los
desechos;
c) Alentar a los países a que busquen soluciones para la eliminación
de los desechos dentro de su territorio soberano y en el lugar más
cercano posible a la fuente de origen que sea compatible con la gestión
ecológicamente racional y eficiente. En algunos países, hay
movimientos transfronterizos para velar por la gestión ecológicamente
racional y eficiente de los desechos. Dichos movimientos cumplen con
las convenciones pertinentes, incluidas las que se aplican a zonas que
no se encuentran bajo la jurisdicción nacional; d) Elaborar planes de
gestión de los desechos de origen humano en los que se preste la
debida atención a la elaboración y aplicación de tecnologías
apropiadas y a la disponibilidad de recursos para su aplicación.
b) Datos e información
21.31 El establecimiento de normas y su vigilancia son dos elementos
clave para reducir la contaminación debida a los desechos. Las
siguientes actividades específicas señalan la clase de medidas de
apoyo que podrían tomar los órganos internacionales, como por ejemplo
el Centro de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos (Hábitat),
el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la
Organización Mundial de la Salud:
a) Reunir y analizar las pruebas científicas y los efectos
contaminantes de los desechos en el medio ambiente con objeto de
formular y difundir las directrices y los criterios científicos
recomendados para la gestión ecológicamente racional de los desechos
sólidos;
b) Recomendar normas de calidad ecológica nacionales y, cuando
proceda, locales basadas en los criterios y las directrices de carácter
científico;
c) Incluir en los programas y acuerdos de cooperación técnica el
suministro de equipo de vigilancia y la capacitación necesaria para
su utilización;
d) Establecer un servicio central de información con una extensa
red a nivel regional, nacional y local para reunir y difundir
información sobre todos los aspectos de la gestión de los
desechos, incluida su eliminación en condiciones de seguridad.
c) Cooperación y coordinación en los planos internacional y
regional
21.32 Los Estados, por medio de la cooperación bilateral y
multilateral, incluidas las Naciones Unidas y otras organizaciones
internacionales competentes, según proceda, deberían:
a) Determinar, elaborar y armonizar metodologías y criterios de
calidad ambiental y sanitarios para el vertido y la eliminación de
los desechos por métodos seguros;
b) Examinar la eficacia de las técnicas y los criterios para la
eliminación de los desechos por métodos seguros y la manera de
apoyar su aplicación en los países, mantenerse al tanto de los
progresos en esa esfera y difundir información al respecto.
Medios de ejecución
a) Financiación y evaluación de los costos
21.33 Los programas de eliminación de los desechos por métodos
seguros conciernen tanto a los países desarrollados como a los países
en desarrollo. En los países desarrollados hay que tratar de mejorar
las instalaciones para cumplir con criterios de calidad ecológica más
elevados, mientras que en los países en desarrollo se requiere una
cantidad considerable de inversiones para construir nuevas instalaciones
de tratamiento.
21.34 La secretaría de la Conferencia ha estimado que el costo total
medio por año (1993-2000) de ejecución de las actividades de este
programa en los países en desarrollo ascenderá a unos 15.000 millones
de dólares, incluidos aproximadamente 3.400 millones de dólares que la
comunidad internacional suministrará a título de donación o en
condiciones de favor. Estas estimaciones son indicativas y aproximadas
únicamente y no han sido objeto de examen por los gobiernos. Los costos
reales y las condiciones financieras, incluidas las no concesionarias,
dependerán, entre otras cosas, de las estrategias y los programas específicos
que los gobiernos decidan ejecutar.
b) Medios científicos y tecnológicos
21.35 Las directrices científicas y la investigación sobre diversos
aspectos de la reducción de la contaminación debida a los desechos serán
decisivos para lograr los objetivos de este programa. Los gobiernos, las
municipalidades y las autoridades locales, con la debida cooperación
internacional, deberían:
a) Preparar directrices e informes técnicos sobre cuestiones tales
como la integración de la eliminación de los desechos en la
planificación del uso de tierras para asentamientos humanos; las
normas y los criterios de calidad ambiental; las opciones para el
tratamiento y la eliminación de los desechos por métodos seguros; el
tratamiento de los desechos industriales; y las operaciones de
vertederos;
b) Emprender investigaciones sobre cuestiones de importancia crítica,
tales como los sistemas de tratamiento de las aguas residuales de bajo
costo y fácil mantenimiento, las posibilidades de eliminación de
fangos residuales por métodos seguros, el tratamiento de los desechos
industriales y las tecnologías baratas de eliminación de desechos en
condiciones ecológicamente seguras;
c) Transferir, de conformidad con los términos y las disposiciones
del capítulo 34, las tecnologías sobre los procesos de tratamiento
de los desechos industriales por conducto de programas de cooperación
técnica bilaterales y multilaterales, y en cooperación con las
empresas y la industria, incluidas las empresas grandes y
transnacionales, en la forma apropiada;
d) Centrar las actividades en la rehabilitación, el funcionamiento
y el mantenimiento de las instalaciones existentes y la asistencia técnica
en el mejoramiento de las prácticas y técnicas de mantenimiento; a
ello seguiría la planificación y construcción de las instalaciones
de tratamiento de desechos;
e) Crear programas para aumentar al máximo la separación en la
fuente y la eliminación por métodos seguros de los componentes
peligrosos de los desechos sólidos municipales;
f) Velar por que paralelamente a los servicios de abastecimiento de
agua existan tanto servicios de recogida de desechos como
instalaciones de tratamiento de desechos y que se hagan inversiones
para crear dichos servicios.
c) Desarrollo de los recursos humanos
21.36 Se necesitaría impartir capacitación para mejorar las prácticas
actuales de gestión de los desechos para que comprendan la recogida y
eliminación de los desechos por métodos seguros. A continuación
figura una lista indicativa de las medidas que deberían tomar los
gobiernos en colaboración con los organismos internacionales:
a) Facilitar una formación académica y práctica que esté
centrada en la reducción de la contaminación, las tecnologías de
tratamiento y eliminación de desechos y el funcionamiento y
mantenimiento de la infraestructura relacionada con los desechos.
También deberían elaborarse programas de intercambio de personal
entre los países;
b) Impartir la formación necesaria sobre la vigilancia y la
aplicación de medidas para la reducción de la contaminación debida
a los desechos.
d) Aumento de la capacidad
21.37 Las reformas institucionales y el aumento de la capacidad serán
indispensables para que los países puedan cuantificar y mitigar la
contaminación relacionada con los desechos. Las actividades
encaminadas a conseguir ese objetivo deberían comprender lo siguiente:
a) Crear órganos independientes de protección del medio ambiente
en los planos nacional y local y reforzar los órganos existentes. Las
organizaciones internacionales y los donantes deberían prestar apoyo
para la capacitación de la mano de obra especializada y la
adquisición del equipo necesario;
b) Conferir a los organismos de lucha contra la contaminación el
mandato jurídico y la capacidad financiera necesarios para llevar a
cabo sus funciones eficazmente.
D. Ampliación del alcance de los servicios que se ocupan de
los desechos
Bases para la acción
21.38 Para finales del siglo más de 2.000 millones de personas
carecerán de los servicios sanitarios básicos, y se estima que la
mitad de la población urbana de los países en desarrollo no tendrá
servicios adecuados de eliminación de los desechos sólidos. No menos
de 5,2 millones de personas, entre ellas 4 millones de niños menores de
5 años, mueren cada año a causa de enfermedades relacionadas con los
desechos. Las consecuencias para la salud son especialmente graves en el
caso de la población urbana pobre. Sin embargo, las consecuencias para
la salud y el medio ambiente de una gestión poco adecuada de los
desechos rebasan el ámbito de los asentamientos carentes de servicios y
se hacen sentir en la contaminación del agua, la tierra y el aire en
zonas más extensas. Así pues, la ampliación y el mejoramiento de los
servicios de recogida y eliminación de los desechos por métodos
seguros son decisivos para lograr la reducción de esta forma de
contaminación.
Objetivos
21.39 El objetivo general de este programa es facilitar a toda la
población servicios de recogida y eliminación de desechos que sean
ecológicamente inocuos y protejan la salud. Los gobiernos, según la
capacidad y los recursos de que dispongan y con la cooperación de las
Naciones Unidas y de otras organizaciones competentes, según proceda
deberían:
a) Tener para el año 2000, la capacidad técnica y financiera y
los recursos humanos necesarios para proporcionar servicios de
recogida de desechos adaptados a sus necesidades;
b) Prestar para el año 2025 a toda la población urbana servicios
adecuados de eliminación de desechos;
c) Velar por que para el año 2025 existan servicios de eliminación
de desechos para toda la población urbana y servicios de saneamiento
ambiental para toda la población rural.
Actividades
a) Actividades de gestión
21.40 Los gobiernos, según la capacidad y los recursos de que
dispongan y con la cooperación de las Naciones Unidas y de otras
organizaciones competentes según proceda, deberían:
a) Establecer mecanismos de financiación para el desarrollo de
servicios de gestión de los desechos en las zonas que carezcan de
ellos, incluidos métodos adecuados de generación de recursos;
b) Aplicar el principio de que "quien contamina paga",
cuando proceda, mediante el establecimiento de tarifas para la gestión
de los desechos que refleje el costo de prestar el servicio y lograr
que quienes generen los desechos paguen la totalidad del costo de su
eliminación en forma inocua para el medio ambiente;
c) Fomentar la institucionalización de la participación de las
comunidades en la planificación y aplicación de procedimientos para
la gestión de los desechos sólidos.
b) Datos e información
21.41 Los gobiernos, en colaboración con las Naciones Unidas y los
organismos internacionales, deberían:
a) Elaborar y aplicar metodologías para la vigilancia de la
producción de desechos;
b) Reunir y analizar los datos para establecer objetivos y
mantenerse al tanto de los progresos alcanzados;
c) Aportar información a un sistema mundial de información basado
en los sistemas existentes;
d) Reforzar las actividades de las redes de información existentes
para difundir a destinatarios seleccionados información concreta
sobre la aplicación de soluciones novedosas y baratas para la
eliminación de los desechos.
c) Cooperación y coordinación en los planos internacional y
regional
21.42 Existen muchos programas de las Naciones Unidas y bilaterales
que tienen por objeto proporcionar servicios de abastecimiento de agua y
saneamiento a quienes carecen de ellos. El Foro Mundial del Consejo de
Colaboración para el Abastecimiento de Agua Potable y el Saneamiento
Ambiental actualmente se ocupa de coordinar el desarrollo de esos
programas y fomentar la cooperación. Aun así, dado que aumenta cada
vez más la población urbana pobre que carece de esos servicios y en
vista de la necesidad de resolver, además, el problema de la eliminación
de los desechos sólidos, es esencial disponer de mecanismos adicionales
para velar por un rápido aumento de la población atendida por los
servicios urbanos de eliminación de desechos. La comunidad
internacional en general, y determinados organismos de las Naciones
Unidas en particular, deberían:
a) Iniciar un programa en materia de medio ambiente e
infraestructura de los asentamientos después de la Conferencia de las
Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo con objeto de
coordinar las actividades de todas las organizaciones del sistema de
las Naciones Unidas que realizan actividades en esta esfera y
establecer un centro de difusión de información sobre todas las
cuestiones relativas a la gestión de los desechos;
b) Proceder a la prestación de servicios de evacuación de
desechos a los que carezcan de ellos e informar sistemáticamente
sobre los progresos alcanzados;
c) Examinar la eficacia de las técnicas y métodos para ampliar el
alcance de los servicios y encontrar formas innovadoras de acelerar el
proceso.
Medios de ejecución
a) Financiación y evaluación de los costos
21.43 La secretaría de la Conferencia ha estimado que el costo total
medio por año (1993-2000) de ejecución de las actividades de este
programa ascenderá a unos 7.500 millones de dólares, incluidos
aproximadamente 2.600 millones de dólares que la comunidad
internacional suministrará a título de donación o en condiciones de
favor. Estas estimaciones son indicativas y aproximadas únicamente y no
han sido objeto de examen por los gobiernos. Los costos reales y las
condiciones financieras, incluidas las no concesionarias, dependerán,
entre otras cosas, de las estrategias y los programas específicos que
los gobiernos decidan ejecutar.
b) Medios científicos y tecnológicos
21.44 Los gobiernos, las instituciones y las organizaciones no
gubernamentales, en colaboración con las organizaciones competentes del
sistema de las Naciones Unidas, deberían iniciar programas en
diferentes partes del mundo en desarrollo para proporcionar servicios de
eliminación de desechos a las poblaciones que carecen de ellos. Siempre
que fuese posible, esos programas deberían basarse en actividades ya en
curso o proyectadas y reorientarlas.
21.45 La expansión de los servicios de eliminación de desechos podría
acelerarse mediante cambios en la política a nivel nacional y local.
Esos cambios deberían consistir en lo siguiente:
a) Reconocer y utilizar plenamente toda la gama de soluciones de
bajo costo para la gestión de los desechos, incluida, cuando sea
oportuno, su institucionalización e incorporación en códigos de prácticas
y reglamentos;
b) Atribuir gran prioridad a la extensión de los servicios de
gestión de los desechos, según sea necesario y procedente, a todos
los asentamientos, cualquiera que sea su condición jurídica, dando
la debida importancia a la satisfacción de las necesidades de
eliminación de los desechos de la población que carece de tales
servicios, especialmente la población urbana pobre;
c) Integrar la prestación y el mantenimiento de servicios de gestión
de los desechos con otros servicios básicos, tales como el
abastecimiento de agua y el drenaje de las aguas de lluvia.
21.46 Se podrían fomentar las actividades de investigación Los países,
en cooperación con las organizaciones internacionales y las
organizaciones no gubernamentales competentes, deberían, por ejemplo:
a) Encontrar soluciones y conseguir equipo para la gestión de los
desechos en zonas de gran concentración de población y en islas de
pequeña extensión. En particular, se necesitan sistemas apropiados
de recogida y almacenamiento de los desechos domésticos y métodos
rentables e higiénicos de eliminación de desechos de origen humano;
b) Preparar y difundir directrices, estudios de casos, análisis de
política general e informes técnicos sobre las soluciones adecuadas
y las modalidades de prestación de los servicios en las zonas de
bajos ingresos donde no existan;
c) Iniciar campañas para alentar la participación activa de la
comunidad, haciendo que tomen parte los grupos de mujeres y jóvenes
en la gestión de los desechos, en especial los desechos domésticos;
d) Promover entre los países la transferencia de las tecnologías
pertinentes, especialmente de las que resulten adecuadas para los
asentamientos de gran densidad.
c) Desarrollo de los recursos humanos
21.47 Las organizaciones internacionales, los gobiernos y las
administraciones locales, en colaboración con organizaciones no
gubernamentales, deberían proporcionar una capacitación centrada en
las opciones de bajo costo de recogida y eliminación de los desechos y,
particularmente, en las técnicas necesarias para planificarlas y
ponerlas en práctica. En esa capacitación podrían incluirse programas
de intercambio internacional de personal entre los países en
desarrollo. Se debería prestar particular atención al mejoramiento de
la condición y los conocimientos del personal administrativo en los
organismos de gestión de los desechos.
21.48 El mejoramiento de las técnicas administrativas probablemente
permita conseguir grandes beneficios desde el punto de vista del aumento
de la eficacia de los servicios de gestión de los desechos. Las
Naciones Unidas, las organizaciones internacionales y las instituciones
financieras, en colaboración con los gobiernos nacionales y locales,
deberían desarrollar y poner en marcha sistemas de información en
materia de gestión para el mantenimiento de registros y de
cuentas municipales y para la evaluación de la eficacia y eficiencia.
d) Aumento de la capacidad
21.49 Los gobiernos, las instituciones y las organizaciones no
gubernamentales, con la colaboración de los organismos competentes del
sistema de las Naciones Unidas, deberían desarrollar la capacidad de
ejecutar los programas de prestación de servicios de recogida y
eliminación de desechos a las poblaciones que carecen de ellos. Algunas
de las actividades que deberían realizarse en esta esfera son:
a) Establecer una dependencia especial, en el marco de los actuales
mecanismos institucionales, encargada de planificar y prestar los
servicios a las comunidades pobres que carezcan de ellos con la
participación de éstas;
b) Revisar los códigos y reglamentos vigentes a fin de permitir la
utilización de toda la gama de tecnologías alternativas de eliminación
de desechos a bajo costo;
c) Fomentar la capacidad institucional y crear procedimientos para
la planificación y prestación de los servicios.
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