27 junio 2013

La Sra. Haya Rashed Al-Khalifa, Presidenta de la Asamblea General, en sus declaraciones de clausura del sexag谷simo primer per赤odo de sesiones, asegur車 a los Estados Miembros que "cuando colaboramos y superamos la desconfianza entre nosotros, podemos conseguir mucho m芍s" y se?al車 que la adopci車n de la tan esperada resoluci車n sobre el reforzamiento del Consejo Econ車mico y Social de las Naciones Unidas constitu赤a un buen ejemplo de ello. Adem芍s, destac車 otros 谷xitos, entre los que cabe mencionar la adopci車n de dos Convenciones internacionales relevantes: la que protege los derechos de las personas con discapacidad y la que garantiza la protecci車n de todas las personas contra las desapariciones forzadas. Los objetivos de desarrollo del Milenio tambi谷n ocuparon un lugar destacado, y en una reuni車n de alto nivel el ex Secretario General Kofi Annan afirm車 que las perspectivas de alcanzar tales objetivos eran "en el mejor de los casos, desiguales" y asegur車 asimismo que "a迆n no era demasiado tarde para cambiar la situaci車n". Exhort車 tanto a los donantes como a los pa赤ses en desarrollo a cumplir la promesa que hicieran los l赤deres mundiales en la Cumbre del Milenio de 2000 de reducir a la mitad la pobreza extrema y mejorar radicalmente la vida de al menos 1.000 millones de personas en 2015. El Fondo Central para Emergencias goza de un apoyo un芍nime
Las contribuciones de los donantes son ahora m芍s predecibles Inmediatamente despu谷s de que la tierra retumbe, de que una gigantesca ola engulla la costa o de que explote una bomba, empieza la carrera por salvar vidas. Cuando, en diciembre de 2005, la Asamblea General cre車 el Fondo Central de Socorro de Emergencia, ofreci車 a los organismos de las Naciones Unidas y a sus socios humanitarios (organizaciones no gubernamentales) la capacidad de estar mejor equipados y de salvar miles de vidas llegando antes a las zonas devastadas.
Propuesto por el ex Secretario General, Kofi Annan, como parte del paquete de reformas de las Naciones Unidas y una vez recibido el mandato de la Cumbre Mundial 2005, el Fondo Central de Socorro de Emergencia se puso en marcha en marzo de 2006. En una reuni車n de alto nivel en la Sede de las Naciones Unidas, el Sr. Annan anunci車 que el Fondo hab赤a comprometido 230 millones de d車lares para 320 proyectos en 30 pa赤ses en diciembre de 2006 (desde el Afganist芍n hasta Zimbabwe, y del L赤bano a Liberia). Afirm車 que 25 millones de d車lares procedentes de los recursos del Fondo hab赤an "reactivado" los esfuerzos humanitarios en el Cuerno de ?frica y contribuyeron a evitar una grave hambruna en la regi車n, garantizando la seguridad alimentaria de millones de personas y mitigando la propagaci車n de enfermedades provocada por la carencia de agua potable. Alab車 la labor del Fondo de Emergencia por ofrecer ayuda tanto en "las crisis olvidadas como en los desastres que son noticia en los medios de comunicaci車n. Aliviar el sufrimiento antes de que la situaci車n se descontrole facilita una transici車n m芍s r芍pida hacia la recuperaci車n y la reconstrucci車n", enfatiz車 el Sr. Annan.
Jan Egeland, ex Coordinador del Socorro de Emergencia de las Naciones Unidas y Jefe de la Oficina de Coordinaci車n de Asuntos Humanitarios de la Organizaci車n, en su llamamiento a los Estados donantes afirm車 que, como el Fondo ya dispon赤a de 395 millones de d車lares, confiaba en que se alcanzar赤a el objetivo de los 500 millones. Se?al車 que Noruega hab赤a contribuido con el equivalente a 12 d車lares per c芍pita y que, si cada pa赤s en desarrollo hiciera lo mismo, el Fondo dispondr赤a de 12.000 millones de d車lares. Aparte de los donantes habituales, se recibieron donaciones de pa赤ses en desarrollo, como Indonesia y Trinidad y Tabago, as赤 como de organizaciones no gubernamentales y gobiernos municipales, como la Prefectura de Hyogo del Jap車n.
El Sr. Egeland afirm車 que estaba sorprendido de c車mo las Naciones Unidas "pasaron de idear el Fondo a crearlo y hacerlo operativo en tan s車lo unos meses". Se?al車 que el tiempo de respuesta a las crisis se hab赤a reducido dr芍sticamente: desde el a?o 2002 al 2005, el 16 % de los llamamientos humanitarios recibieron fondos durante el primer mes, mientras que en 2006 esta cifra aument車 hasta un 37 %. Con un grupo de coordinadores de socorro humanitario de reserva, a los que el Sr. Egeland se refiere como "mariscales de campo", "podremos salvar m芍s vidas que nunca", y lo que a?adi車: "Este ha sido el primer elemento del paquete de reformas del Secretario General que se ha lanzado, financiado y utilizado con eficacia y que cuenta con el apoyo del norte, el sur, el este y el oeste. Es una de las pocas cosas en las que todos los pa赤ses est芍n de acuerdo: ayudar a las personas y salvar vidas."
Seg迆n el Sr. Egeland, las contribuciones que est芍n aportando los donantes son m芍s predecibles y ya no "responden s車lo a los desastres que son noticia en los medios de comunicaci車n", lo que permite que los esfuerzos humanitarios aborden crisis menos conocidas, que en el pasado podr赤an haber quedado desatendidas. Por ejemplo, tras los violentos enfrentamientos entre la polic赤a y el ej谷rcito en abril y mayo de 2006 en Dili, la capital de Timor-Leste, que provocaron extensos incendios, saqueos, destrucci車n de propiedades y da?os personales, m芍s de 100.000 residentes huyeron de sus hogares y la mayor赤a se dirigieron a campos abarrotados, sin suficiente agua potable ni saneamientos. En estas condiciones, enfermedades como la diarrea pueden ser mortales para aquellos refugiados que son m芍s vulnerables, como los ni?os y los ancianos.
Sin embargo, gracias a la financiaci車n del Fondo Central de Socorro de Emergencia, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) contribuy車 a la construcci車n de letrinas y ba?os y a la mejora del acceso al agua potable para 70.000 refugiados de los campos, adem芍s de miles de personas en las zonas rurales. El Programa Mundial de Alimentos pudo distribuir alimentos, concretamente varios centenares de sacos de mezcla de ma赤z y soja y az迆car, as赤 como aceite vegetal y arroz proporcionado por el Gobierno. La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) colabor車 con otros socios en la distribuci車n de 2.300 tiendas, 3.500 l芍minas de pl芍stico, 25.000 mantas, 3.300 bidones, 2.400 juegos de cocina y 200 estufas. En diversas ocasiones estos art赤culos se transportaron incluso por v赤a a谷rea desde Jordania e Indonesia. El Fondo Central de Socorro de Emergencia contribuy車 con m芍s de cuatro millones de d車lares a la crisis de Timor-Leste en agosto de 2006, lo que permiti車 ofrecer una r芍pida respuesta, seg迆n Sof赤a Borges, de la Misi車n Permanente de las Naciones Unidas para Timor-Leste, que destac車 que las primeras 20 letrinas estuvieron operativas 10 d赤as despu谷s del inicio de la crisis.
Carl Skau, de la Misi車n Permanente de Suecia, que facilit車 las negociaciones que condujeron a las resoluciones en virtud de las cuales se cre車 el Fondo, reiter車 su apoyo al mismo. Afirm車 que, en 2005, la negociaci車n result車 muy dif赤cil, porque "muchos pa赤ses no confiaban en que el Fondo de Socorro de Emergencia fuera a disponer de financiaci車n y funcionara bien. Este a?o hemos contado con un apoyo pol赤tico total e, incluso con el objetivo de los 500 millones de d車lares, la resoluci車n se aprob車 sin mayores cr赤ticas." El Sr. Skau, que reconoci車 las posibilidades de crecimiento del Fondo, tambi谷n se?al車 que, aparte de dotarlo de 105 millones de d車lares, en la actualidad la mayor prioridad era garantizar "su responsabilidad y transparencia, para que todos se sientan satisfechos de la manera en que se emplea el dinero."

?

La Cr車nica?ONU??no?constituye un registro oficial. Tiene el privilegio de acoger a los altos funcionarios de las Naciones Unidas, as赤 como a distinguidos colaboradores de fuera del sistema de las Naciones Unidas cuyas opiniones no son necesariamente las de las Naciones Unidas. Del mismo modo, las fronteras y los nombres que se muestran y las designaciones utilizadas en los mapas o en los art赤culos no implican necesariamente un apoyo o una aceptaci車n por parte de las Naciones Unidas.?