El busca nuevas formas de comprometerse con la comunidad para apoyar a las autoridades y hacer frente a la pandemia del COVID-19. Este enfoque ha dado lugar a una asociaci¨®n creativa entre el joven y talentoso artista de hiphop "Krisso MC" y la reci¨¦n llegada Coordinadora Residente de las Naciones Unidas para Bolivia, Susana Sottoli, como escribe Solange Behoteguy de la ONU en Ginebra.
¡°Es como despertar en una pel¨ªcula, un d¨ªa te das cuenta de que el virus est¨¢ en todas partes¡±, dice Christian Lawrence Velez Zambrana, conocido en el mundo del hiphop boliviano como ¡°Krisso MC¡±. Eso fue antes de que las medidas de cuarentena para evitar la propagaci¨®n del COVID-19 detuvieran abruptamente la carrera del joven artista en la capital, La Paz.
Conocido por sus voces de fuego r¨¢pido, ahora, el cantautor de 32 a?os no est¨¢ seguro de cu¨¢ndo podr¨¢ volver al rap ¡ªo al estilo libre, como tambi¨¦n se le conoce¡ª en los teatros, plazas o ferias.
Tiempos dif¨ªciles
A causa de la pandemia, Krisso ha perdido los ingresos que percib¨ªa por cada actuaci¨®n, entre 20 y 30 d¨®lares, por lo que ahora se dedica a recoger materiales para reciclar. Los lleva a un dep¨®sito de la ciudad de El Alto, ciudad donde vive y desde donde observa la hoyada de la capital. Es un trabajo duro que lo aleja de su banda, aunque siempre que puede, saca tiempo para preparar material para su pr¨®ximo disco: ¡°Natural¡±. Krisso es un MC, lo que en la jerga hiphopera significa que no solo hace rap, sino que es un "maestro de ceremonias".
"Me doy cuenta de que tengo influencia sobre la gente y tengo que ser cuidadoso con lo que digo", explica, a?adiendo a modo de ejemplo que cuando participa en eventos escolares, elige bien las letras para evitar romantizar el tema de las drogas y de la violencia.
Tambi¨¦n se ha dado tiempo para ayudar a la ONU a difundir informaci¨®n vital sobre la pandemia a trav¨¦s de su , "El COVID-19 puede afectar a cualquiera".
#YoEnCuarentena
La iniciativa forma parte de la campa?a #YoEnCuarentena del equipo de las Naciones Unidas en el pa¨ªs, que surgi¨® despu¨¦s de que una encuesta realizada a 3000 j¨®venes revelara que muchos cre¨ªan que el COVID-19 solo afectaba a adultos mayores.
Los videos son compartidos con la etiqueta #YoEnCuarentena en Facebook, Twitter, Instagram o You tube y luego son difundidos en las p¨¢ginas oficiales de ONU Bolivia.
¡°El objetivo ¨²ltimo es decirles a los j¨®venes que, a pesar de la incertidumbre, se puede aprovechar el tiempo y que hay un futuro para realizar proyectos y sue?os¡±, dice Susana Sottoli, Coordinadora Residente de las Naciones Unidas para Bolivia, que invit¨® a Krisso a participar en la campa?a.
Se conocieron por primera vez el 15 de febrero durante una mesa redonda de ciudadanos organizada por la ONU para promover el di¨¢logo con los j¨®venes. En aquel entonces, solo hab¨ªan pasado dos semanas desde que Susana aterrizara en el aeropuerto de El Alto con su marido, lista para empezar a trabajar.
Susana lleg¨® al pa¨ªs antes de que la pandemia golpeara Bolivia, en un momento en el que las prioridades de la ONU inclu¨ªan ayudar a restaurar la paz y promover el di¨¢logo social, ya que el pa¨ªs estaba todav¨ªa tambale¨¢ndose por las repercusiones de las elecciones del a?o pasado que resultaron en el derrocamiento del presidente Evo Morales.
Krisso recuerda claramente la reuni¨®n organizada por la ONU: ¡°Me dio la oportunidad de escuchar a distintos j¨®venes que tal vez no segu¨ªan mi misma l¨ªnea en rap y hiphop, pero si en ideolog¨ªas de bienestar humano¡±, dice. "La ONU me da confianza y la oportunidad de llegar a m¨¢s gente".
Para Susana, Krisso representa el ideal del tipo de alianzas que la ONU debe realizar no solo en Bolivia, sino tambi¨¦n en otros lugares.
"Krisso combina todo el ethos de El Alto, una cultura fuerte con una sociedad civil aguerrida pero que tambi¨¦n utiliza un lenguaje ¡ªen este caso musical, comunicacional¡ª que se entiende a nivel mundial", dice. El hiphop ya no se asocia solo con un pa¨ªs, por ejemplo, los Estados Unidos, "existe en todas partes con sus propios elementos culturales y contextuales y los artistas bolivianos lo han adoptado como propio, como lo han hecho tambi¨¦n los j¨®venes de otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina".
Cuesti¨®n de sobrevivencia
Si bien para Krisso las palabras son un arma que utiliza en sus canciones, ¨¦l prefiere no hablar de guerra contra el COVID-19, que, al momento de publicar este art¨ªculo, ha cobrado m¨¢s de 380.000 vidas en todo el mundo. "Las guerras no son buenas para buscar la paz", explica. "Es m¨¢s bien una batalla personal y la pregunta es ?qu¨¦ hago yo para alimentarme, para cuidar a mi familia, para ayudar a mi vecino?"
Krisso creci¨® en El Alto, ciudad compuesta mayoritariamente por migrantes campesinos e ind¨ªgenas y donde todo sucede a 4150 metros sobre el nivel del mar. Realiz¨® varios oficios para sobrevivir: lav¨® pisos, fue alba?il, portero, mec¨¢nico y chalequero.
Antes de que todos tuvieran un tel¨¦fono m¨®vil, los chalequeros eran personas que llevaban chaquetas con los bolsillos llenos de tel¨¦fonos m¨®viles; recorr¨ªan las calles ofreciendo a los transe¨²ntes llamadas baratas ¡ªpor lo general no m¨¢s de un boliviano (0,14 d¨®lares).
Aquello forma parte del pasado y en la actualidad, Krisso se identifica con el hiphop rap conciencia y forma parte del grupo "Profecia Xplicita". Su mensaje es de esperanza e igualdad de oportunidades ¡ªun grito que sorprende cuando lo conoces por primera vez, vestido con chaqueta de combate est¨¢ndar, pantalones anchos y gorra de baloncesto volteada.
¡°Ese es mi camino, muchas personas te juzgan por la forma de vestir o creen que si haces rap est¨¢s metido en pandillas o drogas. Somos muchos los que tratamos de salir de ese ambiente. No es f¨¢cil para un joven trabajar para comer y estudiar¡±.
Soluciones para Bolivia
Decidida a afrontar estos retos tras aterrizar en el aeropuerto de El Alto el 3 de febrero para empezar a trabajar como la nueva jefa del equipo de pa¨ªs de la ONU, Susana opina que el COVID-19 lo revolvi¨® todo: "Ven¨ªa preparada en teor¨ªa, pero el panorama cambi¨® completamente. La agenda pol¨ªtica y la agenda sanitaria se juntaron y tuvimos que dar un giro, cambiar de camino y adaptar la agenda a la nueva realidad que implicaba convivir con un enemigo invisible¡±, dice.
Un momento inolvidable se produjo poco despu¨¦s de que empezara a trabajar, cuando las autoridades le pidieron que ayudara a coordinar la respuesta del pa¨ªs a la pandemia desde la Casa Grande del Pueblo, una enorme torre en el centro de La Paz.
La estructura de 120 metros fue encargada por el ex presidente Evo Morales y est¨¢ cargada de significado pol¨ªtico, amada y vilipendiada por sus partidarios y detractores en igual medida.
El desaf¨ªo
"Recib¨ª una llamada del Gobierno, solicitando la colaboraci¨®n de las Naciones Unidas para establecer una sala de situaci¨®n para gestionar la crisis ligada al COVID-19", dice, y a?ade que el piso 22 se transform¨® en el lugar donde se tomar¨ªan las decisiones clave sobre la crisis sanitaria.
"Para m¨ª fue a la vez un enorme desaf¨ªo y una gran oportunidad dirigir un equipo de organismos de las Naciones Unidas que ayudaron a establecer un espacio estrat¨¦gico de este tipo para combatir la pandemia. El componente de comunicaci¨®n es fundamental en una pandemia", insiste.
Participaron el Gobierno, el Ministerio de salud, el Ministerio de planificaci¨®n, el ej¨¦rcito, el comit¨¦ de emergencia nacional, varias organizaciones del sistema de Naciones unidas y el Centro de Informaci¨®n de Naciones Unidas, CINU Bolivia.
Hoy, Susana pasa la cuarentena trabajando en su casa, desde donde observa "las abrumadoras monta?as" que rodean la ciudad de La Paz, con un brillante cielo azul como tel¨®n de fondo. Le da "una sensaci¨®n de horizonte, luminosidad y esperanza", explica.
Aunque la prioridad inmediata es ayudar a las autoridades a superar el COVID-19, su pr¨®ximo desaf¨ªo es igual de apremiante: dirigir a las Naciones Unidas para que apoyen al pa¨ªs en la preparaci¨®n de las pr¨®ximas elecciones en el contexto de la pandemia.
Tras los turbulentos meses recientes, es probable que no sea una tarea f¨¢cil, especialmente en medio de una crisis sanitaria en curso. Susana tambi¨¦n sabe que pronto habr¨¢ una tercera crisis, relacionada con las consecuencias socioecon¨®micas de la pandemia.
Futuro, perfecto
En la cosmovisi¨®n andina, la representaci¨®n del tiempo es opuesta a la occidental: el futuro est¨¢ detr¨¢s de nosotros, porque no puede ser visto; el pasado est¨¢ delante de nosotros, porque lo conocemos. Quiz¨¢s por eso Krisso no cambiar¨ªa nada de su pasado.
Sin embargo, cree que tendremos que luchar por un futuro libre de teor¨ªas de conspiraci¨®n, supersticiones y desconfianza que han marcado la era COVID. "Antes, durante la crisis pol¨ªtica, las cosas se decid¨ªan por el color del partido que apoyabas; en el futuro, ser¨¢ la desconfianza en el otro ?estar¨¢ enfermo? No se trata de narrar qui¨¦n es el m¨¢s grande o el m¨¢s g¨¢nster, sino de proponer cambios. Vamos a necesitar mucha reeducaci¨®n, volver a dialogar, adaptarnos, construir conciencia¡±, concluye.
