Salud, agua, seguridad alimentaria, e incluso medicinas, puestos de trabajo o regulaci車n clim芍tica son algunos de los bienes que nos aporta la naturaleza.
M芍s de la mitad del producto interior bruto global; es decir, 44?billones de d車lares, dependen de forma moderada o elevada de la naturaleza,1?seg迆n el?. Millones de personas, entre las cuales el 70?% vive en condiciones de pobreza, dependen de recursos naturales para ganarse sus medios de subsistencia.2
La dependencia de nuestras econom赤as de la naturaleza las hace demasiado vulnerables a la degradaci車n medioambiental y al deterioro de la biodiversidad.
El??hasta la fecha sobre el estado de la biodiversidad del planeta realizado por la Plataforma Intergubernamental Cient赤fico-Normativa sobre Diversidad Biol車gica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES) alerta de que en torno a un mill車n de especies de animales y plantas amenazan con extinguirse, muchas de ellos en d谷cadas.3?Estamos siendo testigos de un deterioro de la biodiversidad sin precedentes en la historia de la humanidad. Sus principales detonantes son los cambios en el uso de la tierra y el mar, la explotaci車n directa de los organismos, el cambio clim芍tico, la contaminaci車n y la invasi車n de especies ex車ticas.4
La pandemia de COVID-19 es un recordatorio de la gravedad que reviste la p谷rdida de biodiversidad y de nuestra interconexi車n 迆nica con la naturaleza. En torno a un 75?% de las enfermedades infecciosas emergentes son zoon車ticas, seg迆n un??del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).5?Las zoonosis son generadas por virus que se transmiten de animales a humanos. Si los ecosistemas se deterioran, las barreras naturales entre ellos se eliminan, de forma que se crean las condiciones para una mayor transmisi車n de los virus. La naturaleza nos est芍 enviando un mensaje.
El cambio en el uso de la tierra es un impulsor directo de todos los tipos de pat車genos zoon車ticos. La deforestaci車n del bioma amaz車nico, por ejemplo, sirve de caldo de cultivo para hospedadores y vectores de la malaria y la esquistosomiasis.
Nuestros esfuerzos por revertir la p谷rdida de biodiversidad, aunque en ocasiones fruct赤feros, son insuficientes. Tenemos que acelerar la respuesta global y dejar de alterar el delicado equilibrio de la naturaleza, y tenemos que hacerlo ya.
De esto trata el llamamiento urgente del 5 de junio, el D赤a Mundial del Medio Ambiente: es el momento de pensar en la naturaleza y de situarla en el centro de nuestro modelo de desarrollo. Debemos agilizar con urgencia la incorporaci車n de soluciones basadas en la naturaleza en los planes de recuperaci車n para reconstruir mejor y de forma m芍s verde tras la crisis de la COVID-19.
Colombia, uno de los pa赤ses con mayor biodiversidad del planeta, es el anfitri車n de esta edici車n del D赤a Mundial del Medio Ambiente, en colaboraci車n con Alemania. Hasta la fecha, se ha registrado un total de 58.000?especies en el territorio continental y marino colombiano.6
Colombia es uno de los seis pa赤ses megadiversos de Am谷rica Latina, junto con Brasil, Ecuador, M谷xico, Per迆 y Venezuela. Uno de los ecosistemas m芍s vivos es el bioma amaz車nico, el bosque tropical m芍s grande del mundo. Es hogar de 33?millones de personas y alberga una diversidad biol車gica extraordinaria.7
Las peque?as islas de los Estados del Caribe tambi谷n se encuentran entre las regiones tropicales m芍s biodiversas teniendo en cuenta el tama?o de su territorio colectivo.?En ellas viven unas 11.000 especies de plantas, de las que un 72?% son end谷micas.
Am谷rica Latina y el Caribe son los lugares con m芍s 芍reas marinas y terrestres protegidas. En la actualidad, el 24?% del terreno de estas regiones est芍 protegido, as赤 como el 23?% de las 芍reas marinas fuera de su jurisdicci車n nacional, seg迆n la base de datos Protected Planet.8
Esta riqueza natural es clave para una recuperaci車n verde tras la pandemia. La biodiversidad, que contribuye a la reducci車n de los riesgos de desastres y a la emergencia de enfermedades zoon車ticas, y proporciona servicios ecosist谷micos esenciales para los medios de subsistencia de millones de personas, seguir芍 siendo uno de los activos m芍s importantes de la regi車n para una recuperaci車n sostenible.
En respuesta a la crisis de COVID-19, el PNUMA est芍 redoblando esfuerzos para cartografiar las amenazas zoon車ticas y proteger el medio ambiente con el fin de reducir el riesgo de que se produzcan futuras pandemias
El cambio en el uso de la tierra es un impulsor directo de todos los tipos de pat車genos zoon車ticos. La deforestaci車n del bioma amaz車nico, por ejemplo, sirve de caldo de cultivo para hospedadores y vectores de la malaria y la esquistosomiasis. La tala de 芍rboles ha contribuido en gran medida a la transmisi車n de la fiebre amarilla, dado que los mosquitos vectores que deb赤an volar a 30?metros de altura en los bosques tropicales acaban entrando en contacto con los humanos.
El Instituto de Recursos Mundiales estima que la rehabilitaci車n de tierras degradadas de la regi車n generar赤a potencialmente 23.000?millones de d車lares de beneficios econ車micos en los pr車ximos 50?a?os.9?Las contribuciones estimadas de la naturaleza a las personas se valoran en 6.844?d車lares per c芍pita por a?o en Mesoam谷rica; 33.492?d車lares per c芍pita por a?o en Sudam谷rica y 4.090?d車lares per c芍pita por a?o en el Caribe.10
El comercio ilegal de flora y fauna silvestres, que constituye el cuarto delito mundial m芍s extendido, es otro importante impulsor de enfermedades infecciosas. Las 迆ltimas pandemias zoon車ticas tuvieron su origen en la fauna silvestre y el ganado. Es necesario pues reforzar la regulaci車n y la normativa sanitaria tanto para animales silvestres como dom谷sticos, as赤 como para la carne que se vende en mercados.
En las 迆ltimas tres d谷cadas, todos los pa赤ses de la regi車n han adoptado marcos normativos para la protecci車n y el uso sostenible de la biodiversidad.? La regi車n sigue comprometida con la adopci車n de un ambicioso marco mundial posterior a 2020 que sirva como plan global para la naturaleza bajo el amparo de la pr車xima Conferencia de las Partes en el Convenio sobre la Diversidad Biol車gica de las Naciones Unidas (CDB). La conservaci車n de la biodiversidad tambi谷n resulta clave para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y las metas del Acuerdo de Par赤s sobre el cambio clim芍tico, pues todos ellos dependen de la salud de nuestro entorno.
En respuesta a la crisis de COVID-19, el PNUMA est芍 redoblando esfuerzos para cartografiar las amenazas zoon車ticas y proteger el medio ambiente con el fin de reducir el riesgo de que se produzcan futuras pandemias, tal como se?ala en el documento ??.
El PNUMA se centrar芍 en mejorar la ciencia para comprender mejor las causas profundas de las amenazas zoon車ticas y responder a ellas. Tambi谷n invertir芍 en la naturaleza para lograr una mejor salud humana, una recuperaci車n socioecon車mica sostenible, la reducci車n de la pobreza y la recuperaci車n de los medios de subsistencia. Igualmente, trabajar芍 para concienciar sobre las conexiones entre naturaleza y salud a trav谷s de enfoques innovadores en educaci車n, compromiso p迆blico y cambio comportamental.
En Am谷rica Latina y el Caribe, zonas duramente golpeadas por la pandemia, la formulaci車n de nuevas pol赤ticas fiscales en torno a la COVID-19 puede abrir una ventana de oportunidades para terminar gradualmente con las subvenciones a los combustibles f車siles, invertir en energ赤as renovables y pol赤ticas de adaptaci車n al cambio clim芍tico, y crear empleos verdes. Mediante la mejora de la capacidad de resiliencia de nuestras ciudades y 芍reas rurales y la rehabilitaci車n de tierras y bosques degradados, conseguiremos reducir nuestra vulnerabilidad a futuras enfermedades zoon車ticas y ayudaremos a mitigar el cambio clim芍tico, a la vez que mantenemos nuestra biodiversidad, nuestro abastecimiento de agua y la salud de nuestro planeta.
En las econom赤as dependientes del turismo del Caribe, por ejemplo, se pueden crear m芍s y mejores puestos de trabajo si la actividad tur赤stica se hace m芍s sostenible. De esta forma, se obtendr赤a un mayor rendimiento de inversi車n y se contribuir赤a a la reducci車n de la pobreza.
No obstante, para que los planes de recuperaci車n funcionen, es necesaria la participaci車n activa de todos los sectores de la sociedad. En Am谷rica Latina y en el Caribe, las comunidades afroamericanas han desarrollado medios de subsistencia sostenibles durante cientos de a?os, al igual que las comunidades ind赤genas han hecho por milenios. Tienen que ser escuchados. Son necesarios planes espec赤ficos para proteger a estas comunidades y sus territorios, que incluyan mecanismos de promoci車n de la gobernanza participativa y estrategias para prevenir actividades ilegales, como la miner赤a y la tala ilegales.
Es necesario detener la deforestaci車n, invertir en una mejor gesti車n de las 芍reas protegidas y de nuestras tierras, luchar contra el comercio ilegal de flora y fauna silvestres y fomentar inversiones y empleos verdes. Replante谷monos nuestra relaci車n con la naturaleza y reconstruyamos un mundo m芍s sostenible, m芍s equitativo y m芍s justo.?
Notas
1Foro Econ車mico Mundial en colaboraci車n con Pricewaterhouse Coopers, ?Incremento de los riesgos naturales: Por qu谷 la crisis que est芍 engullendo la naturaleza es importante para la empresa y la econom赤a?, Informe, Serie Nueva Econom赤a Natural (Ginebra, Suiza, 2020), p芍g. 13. Disponible en:?.
2Green Economy Coalition,?The Green Economy Pocketbook: The Case for Action?(Londres, 2012), p芍g.4?.
3Sandra D赤az y otros (Eds.),?Resumen para los encargados de la formulaci車n de pol赤ticas del informe de la evaluaci車n mundial de la IPBES sobre la diversidad biol車gica y los servicios de los ecosistemas?(Bonn, Alemania, secretar赤a de la IPBES, 2019), p芍g. 12.?.
4梆莉赤餃.
5Louis H. Taylor, Sophia M. Latham ?y Mark E. J. Woolhouse, ?Risk factors for human disease emergence?,?Philosophical Transactions of the Royal Society of London. Serie B, Biological sciences, vol. 356, n迆m. 1411 (julio de 2001): 983-9. doi:10.1098/rstb.2001.0888.
6Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Rep迆blica de Colombia, comunicado de prensa, 3 de junio de 2020. Disponible en:?.?
7Leo Heileman, ?S赤 es posible preservar la Amazon赤a?, Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, 10 de septiembre de 2019. Disponible en:?.?
8?Protected Planet, Latin America & Caribbean. Consultado el 5 de junio de 2020.?.
9?Walter Vergara y otros,?The Economic Case for Landscape Restoration in Latin America?(Washington DC, Instituto de Recursos Mundiales, 2016), p芍g. 40.
Disponible en:?.
10Jake?Rice y otros (Eds.),?The IPBES Regional Assessment Report on Biodiversity and Ecosystem Services for the Americas?(Bonn, Alemania, secretar赤a de la IPBES, 2018), p芍g. 134.?.
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La Cr車nica?ONU??no?constituye un registro oficial. Tiene el privilegio de acoger a los altos funcionarios de las Naciones Unidas, as赤 como a distinguidos colaboradores de fuera del sistema de las Naciones Unidas cuyas opiniones no son necesariamente las de las Naciones Unidas. Del mismo modo, las fronteras y los nombres que se muestran y las designaciones utilizadas en los mapas o en los art赤culos no implican necesariamente un apoyo o una aceptaci車n por parte de las Naciones Unidas.?
