17 de noviembre de 2023 

El t赤tulo de este art赤culo se ha extra赤do del primer subtema de la Serie de Di芍logos sobre ?frica 2023 de la Oficina de las Naciones Unidas del Asesor Especial para ?frica. 

Un?informe pol赤tico?en cuya redacci車n particip車 la Oficina de las Naciones Unidas del Asesor Especial para ?frica en mayo de 2023 destaca las estad赤sticas seg迆n las cuales la poblaci車n de clase media africana podr赤a superar el 40?por ciento de la poblaci車n total del continente de aqu赤 a 2060. Este cambio demogr芍fico ofrece a ?frica una oportunidad 迆nica de acelerar su industrializaci車n, allanando el camino a una Cuarta Revoluci車n Industrial. 

La evoluci車n del panorama industrial africano es una historia estrechamente vinculada a la procedencia de su clase media y al cambio estrat谷gico hacia la sustituci車n continental de las importaciones.1 Las demandas y preferencias de esta floreciente clase media desempe?an un papel esencial en la configuraci車n de la trayectoria econ車mica del continente, en que ?frica pasa a ocupar el lugar que le corresponde en el escenario econ車mico mundial. ?C車mo convergen estas din芍micas para influir en la transici車n de ?frica hacia el modelo ? 

Examen del historial africano de intentos de sustituci車n de las importaciones 

Los pa赤ses africanos aplicaron estrategias de sustituci車n de las importaciones entre los a?os cuarenta y cincuenta y entre los a?os sesenta y setenta. Sin embargo, las estrategias no dieron el fruto esperado. En los a?os cuarenta y cincuenta, los gobiernos coloniales no consideraron la industrializaci車n una prioridad pol赤tica, pues ve赤an las colonias africanas como meras fuentes de materias primas de bajo coste y mercados a los que exportar productos manufacturados. En los a?os sesenta, el perfil que heredaron los Estados coloniales no era propicio para iniciar un proceso de industrializaci車n sostenible basado en estrategias de sustituci車n de las importaciones, por lo que surgieron Estados dependientes de las materias primas y basados en la extracci車n de recursos. 

El?Informe de 2022 del Secretario General sobre la promoci車n de la paz duradera y el desarrollo sostenible en ?frica?ahonda a迆n m芍s sobre este fen車meno. Cuando los pa赤ses africanos lograron la independencia, heredaron estructuras de gobierno que no estaban concebidas para gestionar pa赤ses eficientes basados en el concepto de un actor realmente independiente con una pol赤tica de industrializaci車n eficaz e integrada. 

Econ車micamente, las administraciones coloniales se centraron en la extracci車n de recursos y la recaudaci車n de impuestos, sin promover el desarrollo econ車mico, la producci車n ni la inversi車n. Asimismo, priorizaron el ejercicio de la autoridad sobre el respeto de los derechos de las personas desde el punto de vista del Estado de Derecho. Incluso en cuanto al uso del suelo, estas administraciones buscaron controlar los lugares estrat谷gicos por su situaci車n o su valor econ車mico, en vez de garantizar la presencia del Estado. 

Si bien el incremento del poder de consumo es un buen inicio, a largo plazo los pa赤ses africanos deben transformar sus econom赤as y convertirse en productores para los mercados nacionales y de exportaci車n. 

Durante las 迆ltimas cinco d谷cadas, ?frica no ha sido capaz de superar este modelo econ車mico de la 谷poca colonial. Adem芍s, la dependencia de las materias primas mantuvo a las econom赤as del continente en los m芍s bajos escalones de las cadenas mundiales de valor. Debido a este modelo econ車mico, muchos productos de valor a?adido que se aprecian en ?frica vienen desde el exterior. A medida que se expande la clase media, ha de aumentar tambi谷n el inter谷s por estas importaciones de valor a?adido. 

Por este motivo, es fundamental aprender estas lecciones de la historia del continente y de sus fracasadas estrategias de sustituci車n de las importaciones, y optar por un modelo que defienda y proteja los valores de ※Made in Africa§. En el siglo XXI, la situaci車n es tambi谷n totalmente distinta, ya que ?frica presenta mayores niveles de voluntad pol赤tica de controlar sus flujos econ車micos y financieros. 

Clase media africana: nuevo motor de crecimiento? 

La interacci車n entre la floreciente clase media africana, el comercio intraafricano y la industrializaci車n puede servir para impulsar la prosperidad econ車mica del continente. Por un lado, la creciente demanda de productos de consumo de alto valor a?adido puede favorecer los flujos comerciales intraafricanos y ampliar las capacidades de producci車n. Esto tambi谷n requiere la adopci車n de medidas proactivas que mejoren la eficiencia y la competitividad de dichas capacidades, mitigando al mismo tiempo el riesgo de exacerbar los actuales desequilibrios del comercio internacional que durante tanto tiempo han frenado las econom赤as africanas.? 

Los africanos son conscientes de que el continente debe avanzar hacia la diversificaci車n econ車mica y de las exportaciones, para reducir su dependencia de las materias primas y ascender en las cadenas de valor mundiales. Pero tambi谷n deben comprender que las estrategias continentales de sustituci車n de las importaciones pueden acelerar este proceso, al desbloquear la industrializaci車n del continente, impulsando as赤 su capacidad de forjar r芍pidamente la necesaria cultura industrial, crear trabajo digno, densificar y diversificar el tejido econ車mico, consolidar el sector privado y mejorar la gesti車n de las reservas nacionales, a fin de promover una paz y una estabilidad duraderas. 

En consonancia con el discurso de ※Africa Rising§ y con el fin de aprovechar al m芍ximo el potencial de la creciente clase media africana (parte de la cual sigue siendo vulnerable a los impactos externos, especialmente, quienes viven con entre 2 y 4 d車lares al d赤a), el continente necesita desarrollar una econom赤a productiva de amplio espectro, que incremente el poder adquisitivo y facilite la demanda de eficiencia tanto en el sector p迆blico como en el privado. Si bien el incremento del poder de consumo es un buen inicio, a largo plazo los pa赤ses africanos deben transformar sus econom赤as y convertirse en productores para los mercados nacionales y de exportaci車n. 

F芍brica de la Sociedad An車nima Nacional de Cemento de Etiop赤a en Dire Dawa, 15 de marzo de 2013. Foto: Gavin Houtheusen/Departmento de Desarrollo Internacional, extra赤da de Wikimedia.org

En 迆ltimo t谷rmino, la creciente clase media africana proporciona al continente uno de sus m芍s valiosos activos: un mercado en expansi車n. 

Sustituci車n continental de las importaciones: un prop車sito panafricano? 

La sustituci車n continental de las importaciones va m芍s all芍 del proteccionismo. Es un llamamiento a priorizar las industrias africanas y a ponderar y popularizar la marca ※Made in Africa§. Para que este empe?o d谷 su fruto, es indispensable tener en cuenta tres aspectos fundamentales.? 

En primer lugar, la sustituci車n de las importaciones no puede derivar en estructuras productivas ineficientes y debe ir de la mano de la productividad.?La (ZLCCA) est芍 preparada para mitigar este riesgo. Con un mercado potencial de 1.400 millones de personas, la ZLCCA proporciona econom赤as de escala y fomenta la competencia, garantizando la disponibilidad de excelentes productos africanos a precios competitivos. Las pol赤ticas han de centrarse en detectar ineficiencias, y las naciones africanas deben aprender c車mo forjar econom赤as de alta productividad y generadoras de empleo, capaces de aprovechar la innovaci車n y las nuevas tecnolog赤as. Tambi谷n es preciso invertir en la elaboraci車n de programas de alta calidad de desarrollo de capacidades, que proporcionen a la creciente poblaci車n activa del continente las habilidades adecuadas para acceder al mercado laboral y competir al m芍s alto nivel. 

En segundo lugar, se ha de promocionar intensamente ※Made in Africa§.?Un factor de 谷xito clave para esta estrategia es la supresi車n de las barreras comerciales para los productos africanos. Los responsables pol赤ticos deben colaborar para mejorar un sistema que movilice efectivamente la creciente clase media africana, a fin de promover, priorizar y consumir ※Made in Africa§. De este modo se garantizar芍 la inversi車n en el desarrollo de ?frica y la consecuci車n del prop車sito com迆n africano. 

En tercer lugar, se han de aprovechar las oportunidades de crear un efecto domin車.?Los pa赤ses africanos deben priorizar un enfoque centrado en las personas, a fin de aumentar el efecto distributivo de la ZLCCA, aumentando las oportunidades de participaci車n econ車mica de las mujeres y los j車venes, para conseguir una financiaci車n sostenible de control interno. Con ello se podr赤a impulsar a迆n m芍s el crecimiento de la clase media, fortalecer las capacidades productivas del continente y acelerar su industrializaci車n, un efecto domin車 que es preciso generar y mantener para garantizar la competitividad de ?frica en el mercado mundial. 

?frica debe cumplir con sus compromisos clim芍ticos mundiales, pero al mismo tiempo se deben reconocer sus necesidades energ谷ticas espec赤ficas. 

Energ赤a: la piedra angular de la industrializaci車n? 

El modelo Industria 4.0 requiere una base energ谷tica s車lida, que constituye la piedra angular de la transformaci車n econ車mica, la seguridad alimentaria, la educaci車n digital y de todo sistema de salud eficiente. No obstante, ?frica se halla en medio de una paradoja: el continente posee grandes recursos energ谷ticos, pero sufre una escasez cr車nica de energ赤a. Pese a ser el hogar del 17?por ciento de la poblaci車n mundial, solo da cuenta del 3,3?por ciento del consumo mundial de energ赤a primaria. En 2019, la Uni車n Europea, con poco m芍s de un tercio de la poblaci車n africana, consumi車 el triple de energ赤a, y solo el consumo conjunto de Francia y Alemania fue mayor que el de todo el continente africano,?. 

Sin un suministro fiable y asequible de energ赤a, los sue?os industriales de ?frica se ven frustrados por los elevados costos operativos y la baja productividad, convirtiendo la competitividad en un trabajo de S赤sifo. Es fundamental superar esta brecha energ谷tica, ya que una matriz energ谷tica fiable es fundamental para sectores como la producci車n de acero, cemento y fertilizantes. La transici車n energ谷tica verde mundial, que gira en torno a la energ赤a sostenible, tambi谷n depende del potencial africano de procesar los minerales b芍sicos que necesita. ?frica requiere inversiones energ谷ticas que vayan m芍s all芍 del suministro a los hogares y se centren en catalizar el empleo verde y fomentar las industrias de alto consumo de energ赤a. 

Las pol赤ticas ecol車gicas mundiales deben adaptarse a la singular situaci車n de ?frica, cediendo a los pa赤ses africanos la oportunidad de elegir su propia ruta energ谷tica. Un enfoque de talla 迆nica para todos en materia de energ赤a no funciona, ni siquiera con las energ赤as renovables, y el discurso sobre la energ赤a debe priorizar el acceso por encima de la transici車n. De este modo, mientras los pa赤ses africanos tratan de llegar al mismo ※destino verde§ que el resto del mundo, tienen todo el derecho a elegir v赤as diferentes en funci車n de sus distintos puntos de partida. ?frica debe cumplir con sus compromisos clim芍ticos mundiales, pero al mismo tiempo se deben reconocer sus necesidades energ谷ticas espec赤ficas. 

El tapiz del futuro industrial de ?frica est芍 tejido por su creciente clase media, respaldada por una estrategia hacia la sustituci車n continental de las importaciones. Abrazando estos cambios y aprovechando la oportunidad de elegir una ruta energ谷tica acorde con su situaci車n particular, el continente puede hacer realidad las promesas de ※Made in Africa§ y conducir a su gente a una era de prosperidad en Industria 4.0. Este es el camino que lleva al ?frica que queremos, la que el mundo necesita y la que los africanos merecen. 

?Nota 

1 No en el 芍mbito nacional, debido a las econom赤as de escala. 

 

La Cr車nica?ONU? no?constituye un registro oficial. Tiene el privilegio de acoger a los altos funcionarios de las Naciones Unidas, as赤 como a distinguidos colaboradores de fuera del sistema de las Naciones Unidas cuyas opiniones no son necesariamente las de las Naciones Unidas. Del mismo modo, las fronteras y los nombres que se muestran y las designaciones utilizadas en los mapas o en los art赤culos no implican necesariamente un apoyo o una aceptaci車n por parte de las Naciones Unidas.?